El Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) comunica el fallecimiento de su director fundador, el profesor Francisco Sánchez Martínez, quien con su tesón logró crear uno de los centros de investigación más punteros de Europa y dos de los mejores observatorios astrofísicos del mundo: el Observatorio del Teide, en Tenerife; y el Observatorio del Roque de los Muchachos, en La Palma. El fallecimiento tuvo lugar el 21 de octubre de 2025 en Madrid, donde residía en los últimos años, a los 89 años de edad.
El director del IAC, Valentín Martínez Pillet, destaca que “el legado del profesor Sánchez es incalculable. Fue un hombre que abrió camino a la Astrofísica española con visión, coraje y un liderazgo indiscutible. No solo fundó el IAC, sino que sentó las bases para toda una disciplina en nuestro país. Gracias a su esfuerzo, España es hoy una potencia reconocida en la investigación astrofísica. Su figura, como pionero y maestro, será una inspiración eterna para las futuras generaciones”.
El hombre que soñaba estrellas: biografía
Francisco Sánchez (Toledo, 1936-Madrid, 2025) fue uno de los pioneros y promotores de la Astrofísica en España desde que, en el año 1961, viajó por primera vez a Tenerife e inició los primeros estudios de la calidad astronómica del cielo de Canarias.
Con el firme convencimiento de que los cielos canarios eran excepcionales para la observación astronómica, en 1964 consiguió que la Universidad de Burdeos instalara el primer telescopio profesional en el Observatorio del Teide. Un acuerdo internacional con el que sentó las bases de lo que fueron todos los convenios posteriores que permitieron la instalación de telescopios internacionales a cambio de un 20 % del tiempo de observación para la ciencia española.
Con Francisco Sánchez también nació el primer grupo de investigación astrofísica del país, el de ‘Alta Atmósfera y Medio Interplanetario’, y se realizaron las primeras tesis doctorales.
En 1965 se incorporó a la Universidad de La Laguna (ULL) como profesor adjunto de Física en el Observatorio del Teide y en 1969 presentó su tesis doctoral, que fue la primera sobre Astrofísica que se leyó en España. Desde ahí se inició una larga trayectoria y en 1970 se creó en la ULL la primera plaza de profesor de Astrofísica en una universidad española, que ocupó Francisco Sánchez, quien también fue el primer catedrático de la materia en nuestro país en 1974.
En 1973, el impulso de Sánchez logró que se creara el Instituto Universitario de Astrofísica de la ULL, que fue el precursor del actual IAC.
En La Palma, entre 1976 y 1978 se realizaron las obras de la carretera de acceso al Roque de los Muchachos, lo que dio lugar al inicio del actual Observatorio del Roque de los Muchachos, que se ha convertido en uno de los más importantes del mundo.
Otro de los grandes hitos de Francisco Sánchez fue la puesta en marcha, en 1988, de la Ley para la Protección de la Calidad Astronómica de los Observatorios del IAC, conocida como Ley del Cielo, convirtiendo a Canarias en la primera comunidad autónoma que limitó los niveles de iluminación artificial para evitar la contaminación lumínica del cielo.
Entre sus innumerables logros, hay que destacar que Francisco Sánchez fue el impulsor de la construcción y puesta en funcionamiento del Gran Telescopio de Canarias, a través de la sociedad anónima GRANTECAN, S.A, que fue inaugurado en 2009 y que a día de hoy es el telescopio en rango visible e infrarrojo más grande del mundo, ubicado en el Roque de los Muchachos.
En 2007 Francisco Sánchez participó en la Conferencia Internacional Starlight de La Palma de la que surgió “La declaración en la defensa del cielo nocturno y el derecho a la luz de las estrellas”. En 2011 promovió la creación de la Fundación Starlight con el objetivo de difundir los principios de la Declaración de La Palma.
En 2013 Francisco Sánchez dejó la dirección del IAC y, desde entonces, participó en conferencias y recibió nuevas distinciones por su carrera académica y profesional. En 2019 publicó el libro “Soñando estrellas”, un relato autobiográfico que iluminó su amor por el Universo y su compromiso con la astrofísica española.
Entre otras distinciones, Francisco Sánchez fue Premio Canarias de Investigación y miembro de la Real Sociedad de Amigos del País desde 1985 y de la Academia Canaria de Ciencias desde 1987. Asimismo, fue vicepresidente de la European Astronomical Society (EAS), perteneció al Consejo Asesor de Ciencia, Tecnología e Innovación y al Comité de Área de Ciencia y Sociedad del Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED).
Gracias!!
Don Francisco,
Deja usted un recuerdo imborrable en mi memoria por ser la persona que con un acto tan simple como el de firmar una carta, cambió mi vida y me permitió estar donde hoy estoy.
Que el Señor lo tenga en su Gloria, descanse en paz. Amén.
Condolencias por don Francisco Sánchez Martínez
Quiero sumar mi testimonio de admiración por Paco Sánchez.
Así se nos daba a conocer, desde su gran modestia y cercanía, a los que en un tiempo aún inicial, estuvimos trabajando y colaborando en el IAC.
Recuerdo con admiración su humanidad, honestidad, constancia, prudencia y cercanía en el quehacer diario.
A poco de haberme incorporado, cuando la institución ocupaba los módulos dispersos en el camino de la Esperanza, frente a la Facultad de Ciencias Biológicas, en un breve acto social de convivencia en uno de los pabellones del fondo, le recuerdo en su saludo afectuoso y sinceramente interesado en el buen fin de la institución. Me pidió, personalmente y de manera amigable que, con mi trabajo colaborase con él por el buen fin de los objetivos del IAC.
Tuve el privilegio de formar parte de la plantilla del Instituto de Astrofísica de Canarias en octubre de 1981, cuando aún era un estudiante finalista en los estudios de ingeniería industrial por la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Industrial de la Universidad Politécnica de Las Palmas. Llegué hasta La Laguna de la mano de Ernesto Iglesias Groth y su hermano Juan Carlos, para formar parte del equipo del Departamento de Electrónica, entonces dirigido por Sergio González Martín y por Manu Luengo Barreto. Con ellos y otros compañeros asistí técnicamente los observatorios así como una parte del diseño del IAC 80.
Así pues, le envío mi sentido pésame tanto a su familia como a la gran familia del IAC. Especialmente a los muchos compañeros de antaño, con los que compartí intensas jornadas de técnica y de ciencia hasta que mis obligaciones laborales posteriores me llevaron a otros lugares ya en 1983.
Muchas gracias, Paco. Descansa en paz.
Añadir nuevo comentario