En este trabajo presentamos nuevas observaciones espectroscópicas realizadas con el instrumento OSIRIS instalado en el telescopio GTC de 10.4m del sistema binario de rayos-X con agujero negro XTE J1118+480 que confirma el decaimiento del período orbital de (dP/dt) = −1.90 ± 0.57 ms yr−1. Este corresponde a un cambio en el período de −0.88 ± 0.27 μs por ciclo orbital. Se han utilizado las observaciones del sistema binario de rayos-X con agujero negro A0620-00 para determinar una derivada del período orbital de (dP/dt)= −0.60 ± 0.08 ms yr−1 (−0.53 ± 0.07 μs/ciclo). La pérdida de momento angular por emisión de ondas gravitatorias es incapaz de explicar estos grandes decaimientos orbitales en estos dos sistemas binarios de corto período. EL decaimiento orbital medido en el sistema A0620-00 es marginalmente consistente con las predicciones de los modelos convencionales incluyendo frenado magnético, aunque se necesita una pérdida de masa del sistema significativa ((dMBH/dt)/(dM2/dt) ≤ 20 por ciento). La caída en espiral de la estrella en XTE J1118+480, sin embargo, no es posible explicarla con ningún modelo estándar, y quizás puede ser entendida mediante frenado magnético bajo campos magnéticos extremadamente intensos, y/o quizás un proceso desconocido o una teoría alternativa de la gravedad puedan explicarlo. Este resultado quizás sugiere una secuencia evolutiva en la que el decaimiento del período órbital se acelera cuando el período orbital decrece. Este escenario quizás tenga un impacto en la evolución y el tiempo de vida de los sistemas binarios de rayos-X de baja masa que albergan agujeros negros.
Fecha de publicación
Otras noticias relacionadas
-
Las estrellas masivas, aquellas que tienen más de diez veces la masa de nuestro Sol, son el origen de la mayoría de los elementos de la tabla periódica, dando forma a la composición morfológica y química de sus galaxias anfitrionas. Sin embargo, el origen de las más luminosas y calientes entre ellas, conocidas como 'supergigantes azules', ha sido debatido durante décadas. Las supergigantes azules son estrellas enigmáticas. Primero, son numerosas, a pesar de que la física estelar convencional predice que vivan solo brevemente. Segundo, típicamente se encuentran aisladas, a pesar de que laFecha de publicación
-
El desarrollo de la última generación de telescopios tipo Cherenkov (IACT de sus siglas en inglés) en las últimas décadas ha llevado al descubrimiento de nuevos fenómenos astrofísicos extremos en el rango de rayos gamma de muy alta energía (VHE de sus siglas en inglés, E > 100 GeV). La astronomía multi-mensajero y temporal está inevitablemente conectada a la física de fuentes transitorias emisoras de rayos gamma VHE, que muestran explosiones o periodos eruptivos de manera inesperada e impredecible en diferentes escalas de tiempo. Estas fuentes transitorias comparten a menudo procesos físicosFecha de publicación
-
La formación y evolución del disco de nuestra galaxia, la Vía Láctea, sigue siendo un enigma en la astronomía. En particular, la relación entre el disco grueso y el disco delgado —dos componentes clave de la Vía Láctea— aún no está clara. Entender las propiedades químicas y dinámicas de las estrellas en estos discos es crucial, especialmente en las regiones donde sus características se superponen, como alrededor de [Fe/H] ~ -0.7, que marca el extremo pobre en metales del disco delgado, superior al del disco grueso. Esto suele interpretarse como un indicio de que el disco delgado se formó enFecha de publicación